Fascinación. Es la palabra que mejor describe lo que se siente al entrar por primera vez en la iglesia barroca rural de Lachapelle: el dorado brillante, las galerías de estilo italiano y las decoraciones pintadas son tesoros que conforman una visita sorprendente y extraordinaria.
La historia de esta iglesia única en Francia comienza en 1761, cuando un cura que había estudiado en Roma, según la leyenda, decidió decorar la iglesia de su pueblo con un estilo barroco para convertirla en una pequeña joya. Inspirada en el movimiento barroco de Luis XV con influencias muy rococó, gran parte de la iglesia está cubierta de oro.
Esta deslumbrante decoración se contrapone a la austera ornamentación protestante de la época y rebosa de secretos y misterios, explicados por la guía.
Plafond trompe l'oeil église baroque de Lachapelle
Las famosas galerías de este lugar de culto, con sus formas cóncavas y convexas, reproducen a la perfección las alcobas de los teatros venecianos. La particularidad de esta iglesia es que las galerías no están reservadas al órgano, sino que ambas plantas están previstas para recibir a los parroquianos.
Tribunes baroques de l'église de Lachapelle. G.Cassaro
La decoración de la capilla no ha sido alterada desde su creación, solo renovada: ornamentación de la boiserie, mármol falso pintado, drapeado de las pinturas, columnas clásicas de las paredes, papel pintando en trampantojo… Una inesperada joya que sorprenderá a los visitantes.
En 1991, el descubrimiento del techo original permitió reproducir en su totalidad la decoración del siglo XVIII. Un papel pintado que utiliza cruces y octógonos idénticos crea un trampantojo de artesonado.
Détail de l'église de lachapelle. G.Cassaro
Recomendamos esta iglesia por estar situada en plena región de Lomagne y por presentar dos aspectos diferentes: el primero en el exterior, de estilo gótico, junto al castillo, y el segundo en el interior, donde la decoración con formas barrocas transmite una sensación de envoltura.
Eglise baroque de Lachapelle. Laetis